Ante la sorpresivamente de Chadwick Boseman, el director y productores tuvieron que dar un cambio radical a la trama.

El elenco y el equipo de Black Panther: Wakanda Forever hablaron mucho acerca de sus sentimientos sobre continuar la película sin el protagonista original, Chadwick Boseman, pero muy poco sobre cómo habría sido la secuela si el actor no hubiera fallecido en 2020. Como la película se ha convertido en un éxito en la taquilla y parece estar lista para obtener premios como lo hizo la primera película, muchos aún se preguntan podría haber sido. Anteriormente se dijo que la película de 2022 era “espiritualmente similar” a los planes originales y, comprensiblemente, nadie involucrado ha dado más detalles al respecto.

En una entrevista con el New York Times, el director Ryan Coogler y el coguionista Joe Robert Cole hablaron sobre su plan inicial para Wakanda Forever, y suena temáticamente en línea con lo que está actualmente en los cines. Pero antes de hablar de eso, necesitaremos esto…

Coogler ya había hablado sobre cómo Wakanda Forever se habría centrado inicialmente en T’Challa sintiendo una sensación de pérdida después de desaparecer en Avengers: Infinity War para volver cinco años después en Avengers: Endgame. Esa sensación de desplazamiento habría sido el tema clave de la película, enfatizado cuando se enteró de que su pareja Nakia (Lupita Nyong’o) tuvo su hijo durante ese salto temporal de cinco años. Nos encontramos con su hijo Toussaint (también conocido como T’Challa II) en los momentos finales de Wakanda Forever, interpretado por Divine Love Konadu-Sun, pero originalmente tenía un papel mucho más importante en la secuela.

A partir de ahí, continuó Coogler, habríamos visto a T’Challa criar a Toussaint con Nakia durante los próximos tres años, incluyendo una secuencia en la que los dos pasaron el octavo cumpleaños de Toussaint viviendo fuera de la tierra de Wakanda. T’Challa habría tenido que haber salvado el mundo con su hijo a cuestas. Namor (Tenoch Huerta Mejía) todavía estaba destinado a ser el antagonista, pero habría sido solo uno de los villanos principales. Allegra de Fontaine (Julia Louis-Dreyfuss) habría sido la segunda. “Era básicamente un conflicto a tres partes entre Wakanda, Estados Unidos y Talokan. Pero todo era principalmente desde la perspectiva del niño”.

Dado que las películas de Black Panther (y la filmografía de Coogler) están arraigadas en la idea del legado y la paternidad, tal vez no sorprenda mucho saber que esta idea habría continuado para la secuela. Aun así, no podemos evitar preguntarnos cómo habría sido ese tipo de película, no solo porque las películas de Marvel han puesto tanto énfasis en que sus personajes principales tengan sus propias familias, sino también por cuán diferente sería la versión de Coogler y Cole de estas historias de padre e hijo. 

Fuente: Gizmodo