El acto afirma, en una entrevista, que en muchas ocasiones estuvo al borde de la muerte.
Matthew Perry, uno de los actores más icónicos de la televisión gracias a su papel de Chandler en Friends, se ha abierto en canal en su última entrevista. Con motivo del lanzamiento de su próximo libro de memorias (Lovers, and the Big Terrible) que sale el próximo 1 de noviembre en Estados Unidos, Perry ha concedido una entrevista a la revista People que ha dejado muchos titulares.
El actor ha confesado algunos de los peores episodios que vivió durante los años de mayor auge de Friends, llegando a confesar que estuvo a punto de morir por el uso excesivo de opioides. Esto provocó que estuviera varias semanas en coma.
Pero la cosa no se queda ahí. El actor de Friends también ha revelado que ha tenido 14 cirugías de estómago y que utilizó una bolsa de colostomía durante nueve meses. A todo esto hay que sumarle las 15 veces que estuvo en rehabilitación por el abuso de alcohol y drogas.
Matthew empieza el reportaje de la revista explicando la verdadera razón por la que ha decidido contar su historia en estos momentos: “Quería compartirla cuando ya me viese a salvo de aquel lado oscuro y pudiese ayudar a la gente»
Perry continúa hablando sobre cómo su adicción a los opiáceos hizo que su colon explotase hace cuatro años. Un hecho que lo dejó en coma durante dos semanas. Este horrible episodio, por suerte para el actor, pasó desapercibido por los medios. Tras varios meses en el hospital, Matthew tuvo que llevar durante bastante tiempo una bolsa de colostomía.
El actor recuerda las duras palabras que le dijeron los doctores cuando entró en el hospital: “Los médicos le dijeron a mi familia que tenía un dos por ciento de posibilidades de vivir. Me pusieron una máquina que hacía toda la respiración. Estoy agradecido por estar vivo”.
El actor reconoce que durante aquellos años en los que estuvo luchando con sus adicciones, sus compañeros de la serie fueron muy pacientes.
Por suerte, ahora Matthew se encuentra en un buen momento de salud. El actor reconoce que todas las cirugías por las que ha pasado en los últimos años le recuerdan que no puede volver a ese tipo de vida.
El actor reconoce que en su libro habla sobre todas estas adicciones con más detalles. Además comparte una reflexión que ha dejado a sus fans en shock: «Digo en mi libro que si muriera, impactaría a la gente, pero no se sorprenderían. Y vivir con eso da mucho miedo”.
Ahora, Matthew cuenta su historia para intentar ayudar a aquellas personas que han pasado por algo parecido.
Fuente: El Financiero
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