Por Edel López Olán (Cinema Gizmo)
El terror ha sufrido una evolución constante durante toda la historia del cine y el entretenimiento. Desde el gore interminable hasta el terror comercial de la actualidad, el género tiene un número exponencial de cintas, libros y series que engalanan su historia, pero también, la mantienen en una interminable insatisfacción por parte de los fanáticos que hoy en día se siguen quejando de una fórmula desgastada y sin sentido.
Actualmente el streaming se ha convertido en esa conexión entre el espectador y el entretenimiento. Muchas películas y series se encuentran enfocadas a entretener, y otras más abultan la oferta de las plataformas sin ningún tipo de guía, algo que comienza a ser fastidioso, pero, Them, serie antológica original de Amazon, rompe este esquema y replantea de nuevo como el drama y la terror no se encuentran peleados del todo.
La serie gira alrededor de la familia Emory, una familia de color que decide asentarse en un barrio blanco de Los Ángeles en la gran migración de 1949 dónde muchas familias afroamericanas deciden abandonar el sur y comenzar a incorporarse a una sociedad que los rechaza y los violenta a cada paso que dan.
Cómo espectador nos decantamos por una serie más de conciencia social con tintes racistas que una serie explícita de terror, sin embargo, desde el primer capítulo, la serie comienza a envolvernos en una increíble sesión psicológica no apta para estómagos sensibles. Todos los capítulos corresponden a un día en la vida de los Emory y su singular y trastornado vecindario. El impresionante primer capítulo nos recuerda un poco a ese terror psicológico que Alfred Hitchcock implantó en nuestro cerebro con «The Birds» y lentamente, el terror psicológico y sobrenatural combinados, nos llevan a un viaje perfecto por el universo de Stanley Kubrick, estos dos factores fueron usados a lo largo de toda la intrépida serie por su creador Little Marvin y plasmada perfectamente por los directores Nelson Cragg y Craig McNeil y con una fotografía colorida, tétrica e inspiradora del peruano Checco Varese.
La familia Emory comienza a perder la razón por la maldición sobrenatural que existe dentro de la casa, misma que los engulle lentamente obligándolos autodestruirse lentamente arrastrando al espectador junto con ellos a la desesperación que acontece en la colorida vecindad, al mismo tiempo, el terror provocado por el racismo y los actos violentos de sus vecinos llevan al espectador a una divergente interesante dónde no reconoces si lo sobrenatural obliga a los vecinos a ensañarse con la familia o simplemente el terror principal de la serie proviene un racismo sin sentido provocado por la ignorancia de una sociedad que se piensa merecedora de todo.
Y este es el punto fundamental de la serie: El contexto social.
La protagonista Lucky Emory magistralmente interpretada por Deborah Ayorinde intenta mantener la cohesión de la familia en contra de todas las expectativas mientras batalla con sus demonios internos, re configurando la felicidad de sus diezmados miembros, cada uno con un pasado tétrico que los ha separado de una forma que ni siquiera ellos han entendido. Su esposo, un abnegado hombre trabajador y ex veterano de la guerra, trata de mantener la cordura mientras esgrime una batalla personal y profesional para seguir adelante mientras su culpa y sus miedos lo expulsan de la cordura y la paz que merece su nueva vida en el este de South Comptom

Them es el ejemplo perfecto de que el buen terror aun está a nuestro favor, y desde una historia perfecta desde su origen hasta su emocionante final, es innegable que cualquier terror sobrenatural será superado por la maldad de la realidad de un mundo que se devora entre ellos mientras justifican sus motivos entre la religión, el odio y las diferencias raciales, y que al final son el resultado de los deseos oscuros de una sociedad vengativa, racista y sin ningún tipo de respeto por la vida, y ese, es el verdadero terror de la serie.
Simplemente increíble, digna de un maratón a través de sus 10 episodios , una recomendación de Cinema Gizmo